Cartas de Papá Noel - J.R. Tolkien

A lo largo de 23 años, los hijos de J.R. Tolkien recibieron, en el mes de diciembre, cartas del Polo Norte.



El escritor comenzó la tradición en 1920, cuando su hijo mayor tenia 3 años y la última carta fue en 1943, cuando la menor cumplió 14.
Las cartas eran manuscritas con la temblorosa letra del mismísimo Papá Noel, y en ella relataba sus aventuras en el polo norte. 
Las primeras cartas fueron cortas y concisas. Sin embargo, a medida que avanzaban los años, las historias se hicieron más largas y aparecieron otros personajes fantásticos. 
Estas maravillosas cartas y sus ilustraciones fueron recopiladas en el libro "Cartas de Papá Noel". 

Aquí una muestra de este mágico libro 👇

Primera Carta

Hogar de Papá Noel,
Polo Norte
22 de diciembre de 1920

Querido John:
Me he enterado de que le has preguntado a tu papá cómo soy y dónde vivo. He hecho un autorretrato y he dibujado mi casa.
Guarda bien el dibujo. Ahora mismo me marcho a Oxford con el saco lleno de regalos (algunos para ti).
Espero llegar a tiempo: esta noche la nieve es muy espesa en el Polo Norte. 
Con cariño, 
                        Papá Noel.



Casa del Acantilado,
Polo Norte, Navidad de 1943
Mi querida Priscilla:

¡Feliz Navidad! Confío en que este año vuelvas a colgar el calcetín, porque todavía me quedan algunas cositas para ti. Después tendré que despedirme más o menos: me refiero a que no me olvidaré de ti.
Siempre guardamos los números antiguos de nuestros amigos de toda la vida, y sus cartas; y con el tiempo esperamos volver a saber de ellos, cuando se hacen mayores y tienen casa propia e hijos.

Me han dicho los mensajeros que la gente llama a este año «nefasto». Creo que se refieren a triste, y me temo que es así en muchos de los lugares a los que me gusta ir. Me alegro mucho de saber que tú no estás del todo triste. ¡Ni se te ocurra!

Me queda mucha cuerda y no tardaré en volver, tan alegre como siempre. Aquí no hemos sufrido daños, y aunque mis existencias se agotan, espero poder solucionarlo pronto.

El Oso Polar (que dice que está demasiado «cansado» para escribir) 

Y es «verdaz» 

te manda un mensaje especial: ¡mucho cariño y un abrazo! 
Me ha pedido que te pregunte si todavía tienes un oso que se llama Silly Billy o algo así, ¿o se ha estropeado?

Dales muchos recuerdos a los demás: John, Michael y Christopher, y, por supuesto, a todos los muñecos mascota de los que solías hablarme. 

El Oso Polar y todos los Oseznos están estupendamente. Este año se han portado muy bien y casi no han tenido tiempo de hacer travesuras.

Espero que encuentres casi todas las cosas que querías y lamento no tener más «lenguas de gato». Para compensar, te he regalado casi todos los libros que me pediste. ¡Ojalá tu calcetín esté a rebosar!

Con mucho cariño de tu viejo amigo, 
Papá Noel






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